La Lenta Marcha 

“Una fusión en su punto”

Foto y reseña: Lila O_V

 

LA LENTA MARCHA, un festival que fusiona artistas visuales y música con un concepto único enfocado al arte y movimiento, tuvo lugar este 26 de Agosto en León, Gto., un espacio creado para experimentar sonidos de la escena local y nacional, así como consumir de artistas locales.

 

Alrededor de las 2 de la tarde comenzó el picnic con un recorrido por los stands de los artistas  como Aeron 200, Mister Lemonade, Caponni, San Venganza, Carolina Duran, Sabia Diabla, Rucksi, Kemmer, Cardouls, Fakto, Ían Ruíz, donde pusieron en venta playeras, tote bags, prints, serigrafía, pinturas, stickers, entre otros artículos. 

Mientras tanto pinchando discos de vinil el crew de Past Life, con su selección de música brasileña algo de ethio jazz, afro disco y sonidos del mundo. También pusieron una parte de su tienda para los coleccionistas de este formato, con discos de rock, alternativo, funk, soul, hip hop y más. Al caer la noche siguió el set de Marson Capa, con sus sintetizadores hizo bailar a todos los presentes. 

Hexagrams fue la banda que abrió la tocada, ellos son una banda de León que suenan como si estuvieras en un sueño sombrío, un rock experimental con toques de post punk, enfocados a disfrutar del presente, el desapego, buscan deslindarse de las normas y encontrar sentido en la música. 

La siguiente banda Monte meteoro, evocó melodías psicodélicas como un viaje entre estrellas, el rollo de esta banda de Monterrey se podría describir como experimental, rock, post punk, algo noisy. 

El slam se armó cuando The Froys comenzaron a sonar, esta banda de Ciudad de méxico hizo que todos vibraran en la misma sintonía con su rolas de garage, surf punk. 

Para terminar la noche los Mengers hicieron al público reventar, ondas enérgicas que se transmitieron por todo el lugar, tintes de garage, psicodelia y ruido que te invitan a entrar al mosh pit a rockear. Sus sonidos progresivos marcan su identidad dentro de la escena nacional. 

Lo único que nos queda decir es que la mezcla de arte gráfico y música nos dejaron satisfechos y con ganas de más eventos tan únicos como el del Sábado. Sin duda una fusión en su punto. 

 

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