IMANES DE ENERGÍA

DOLPHANT

Nuestra bella ciudad cuenta con un sinfín de propuestas y más aún en la escena musical
alternativa. Tal es el caso de Dolphant, encargados de embellecer aún más la noche del
Viernes 18 de Mayo con sede en el Centro Cultural Breton A.C.
En punto de las 21:00 horas el escenario del recinto se pintaba en la penumbra de una
tonalidad púrpura y acogido el público en su totalidad por una buena vibra se
intercambiaban palabras los unos con los otros, mientras que por otro perfil se
observaban a los restantes cubriendo su rostro de pintura fosforescente la cual en
momentos más tarde resaltaría al sonar de la música.
En un ambiente familiar y dadas las 22:00 horas, Agris LaLópez vocal de proyectos como
Galgo y Cobra Kai al sonar de sus punteos y acordes suaves de guitarra, se encargaría de
llenar a los escuchas con un tinte melancólico con temas como Los que no me quieren y
Pájaro Amarillo; el público sin duda recibió bastante bien las melodías de la artista al
sonar las palmas en conjunto de los gritos y chiflidos.
Minutos más tarde de finalizar el acto de la telonera se notaba a los integrantes de
Dolphant bastante empáticos con los espectadores y al verlos subir a el escenario sin más
demora se notaba la calidad sonora y la humildad de la banda, tal fue el caso que para el
tercer track anunciaban que seguía Shine, para sucederle con su más reciente sonar como
lo es Fantasma Personal.

Más delante regresaríamos a tiempos pasados con el tema Papers, demostrando que la
banda se encontraba trazando un viaje a tráves de su pasado, su presente y cargándose
como imanes de energía para lo que será su futuro.
Posteriormente y en lo personal una de las mejores canciones que sonaron esa noche fue
Nyx, proveniente de Erebos, ya que la sintonía era tan perfecta de emisor a receptor que
mi felicidad, asombro e intento de saber si era real lo que escuchaba se mezclaban
homogéneamente.
La banda salía de escena y Oscar se encontraba mostrándonos con su voz una nueva
canción a la par de un Piano y continuando pasabamos a un mundo hecho música
inspirado en la literatura del gran Orwell.
El quinteto se aproximaba a el presente y a la euforia de su última producción con Hades a
quien le siguió el clímax y clave de la noche al interpretar con Agris el tema Perséfone y
finalizar dejando un buen sabor de boca con Pandora situada en un encuentro nostálgico
de esperanza ante un mal enorme difuminado por una sonrisa y sin duda una frase que
quedará en mi mente espero y el resto de mis días y que recitaba así:
La vida no es combatir hasta el final, sino no perder lo que eres.

Dolphant un orgullo de Guadalajara que esperemos y sigan haciendo buena música y que
los medios masivos volteen más a este tipo de propuestas no solo por la calidad sonora,
sino por la empatía y la calidad de humanos que son.

Por Javier Sainz
foto: Mitzy Muro