Los Auténticos Decadentes
Reseña: Leo Ramirez/ foto: Gabriela Duran
Algo se espera en general de una banda que tiene muchos años en la escena y eso es que den un espectáculo magnífico y ejemplar, pues por su experiencia habrían de saber cómo resolver problemas, así como poder brindarle lo mejor a su audiencia. Y los Auténticos Decadentes son justamente una banda que, con más de treinta años en su haber, se espera de ellos un concierto maravilloso. Y menos que eso no fue lo que dieron. Incluso puede decirse que su concepto de Unplugged debe ser apreciado en directo para poder ser disfrutado a la máxima expresión.
De hecho, ya he escuchado opiniones sobre su Unplugged, y que realmente las canciones bajo esos arreglos no parecen tener la misma calidad. Tal vez haya algo de cierto, pero los arreglos terminan siendo realmente entrañables. Como Loco, Amor o Un osito de peluche de Taiwan, canciones de las más coreadas por todos los asistentes al Teatro Diana, el cual retumbaba con los coros de todas las personas que abarrotaron el lugar. Así que su unplugged en general gusta bastante y realmente ha atrapado a los seguidores de la banda.
Y para tener tal concepto, la fiesta estaba de lo más prendida. Iniciaron recorriendo el camino entre butacas del teatro ya tocando como en carnaval dando inicio al momento esperado de la noche. Por fin los Auténticos comenzarían a tocar y la noche cobraría un sentido de lo más especial. La gente que asistió estaba de lo más arreglada y preparada para el concierto. Inició entonces El Murguero. Canción festiva que nos dejaba saber que, desde instante en adelante, todo iría creciendo y todo sería una fiesta espectacular.
Como ya había mencionado, el público coreaba sus canciones en todo momento. No sólo eran las voces de Cucho y Perro Viejo, cada uno de los que estuvieron ahí se hacían sonar en todo el Diana. Y eso me hace pensar en toda la energía que se impregnará en esas paredes los días subsecuentes hasta el sábado, fecha que se abrió por la demanda que produjo la llegada de los argentinos a tierras tapatías.
De repente nos dicen que seguramente la canción a continuación la conoceríamos. Un pequeño regalo curioso para su audiencia mexicana, el cover de los Tigres del Norte, Golpes en el corazón. La cual evidentemente conocíamos y fue bien recibida en el estilo de esta banda que ya nos había conquistado a todos. Y el siguiente punto, que definitivamente marcaba el inicio del fin, La Guitarra, un himno juvenil que parece representar a muchos de nosotros y nuestros ideales del pasado.
El público quedó más que maravillado. Todo el entusiasmo y emoción se sentían desde antes de entrar al Diana. Parecía que el aire podía acariciar nuestros cabellos como mimetizándose con el aire y los alientos de la gente que después estaría cantando con sus corazones en las manos. Un gran concierto que en verdad merece ser visto y espero que así como en la primera fecha, aquellos que vayan los días siguiente se la pasen igualmente de maravilla. Y esperamos que también alcancen boleto para ir el sábado.
Esperamos que los Auténticos vean que son más que bien recibidos en estas tierras tapatías. Así que habremos de esperarlos para volver a experimentar una fiesta así de emotiva. Agradecemos la gran entrega de ellos hacia nosotros y seguiremos viendo sus reacciones y opiniones con respecto a esta serie de conciertos en el Teatro Diana, sabiendo de antemano que esas más de tres décadas de experiencia nos aseguran una noche entrañable.